Queridos hermanos:
Estas fechas en que florecen los mejores deseos, los sentimientos humanos más entrañables, los valores sociales propios de las raíces cristianas de la cultura; estos días de fiesta, alegría, de calles, plazas, y casas engalanadas de adornos, luces, llenas de paz y esperanza son propicias para anunciar al verdadero protagonista: Jesús.
La Natividad del Señor y su Epifanía son fiestas cristianas para llenarnos de alegría verdadera; vivir y transmitir las virtudes que manan del Evangelio; una ocasión maravillosa para el perdón, el regreso, el encuentro, y el abrazo al único Dios que se hace presentes en nuestras vidas e historia, fiestas cristianas como no, también para EVANGELIZAR.
Jesús es la Palabra. Jesús es Camino, Verdad y Vida. Jesús es el Regalo deseado y esperado aunque como todo presente es necesario enseñarlo. Anunciarlo.
Anunciarlo siempre, en todo momento y lugar como lo hicieron los ángeles la noche que nació, o los apóstoles después de Pentecostés.
Anunciarlo es misión de todos los bautizados no sólo del cura o los catequistas, hay que enseñar este regalo en la feligresía a los vecinos que no lo conocen, a los cercanos que se han apartado, a los allegados que viven sin Él, mostrarlo sin miedos ni titubeos. Enseñarlo a familias, niños, jóvenes, ancianos… hay que enseñar y anunciar su obra y su mensaje de amor.
Que alegría oír ¡Feliz Navidad! Verlo presente junto a María y José en el portal de Belén en los escaparates de nuestro barrio, no perdamos tan santas costumbres que eso es Evangelizar como también lo es la de hacernos presentes en las redes sociales y en nuestra página web puesta en marcha recientemente en la que tanto interés he puesto, para informar además de nuestra vida y actividad pastoral
Familia: enseñemos y anunciemos a Jesús desde la experiencia del corazón y pongámoslo de manifiesto con nuestras obras. El Nacimiento del Señor y su Epifanía protagonice esta fiesta cristiana en nuestra feligresía y la Solemnidad de Santa María Madre de Dios, el día de Año Nuevo sirva, para en su compañía, ser Mercedes de cuántos nos rodean.
En mis oraciones y con mi bendición.
Feliz Navidad.
Florentino Córcoles Calero. Párroco.